IOMA homenajea a sus trabajadores Veteranos de Malvinas con una emotiva Muestra
Durante la apertura del encuentro, el titular del IOMA, Antonio La Scaleia, señaló que “en este Espacio Cultural IOMA, en que hemos llevado adelante otras muestras como las de Abuelas de Plaza de Mayo, apostamos a darle una mirada saludable a la cultura. Porque creemos férreamente en el cuidado de la memoria y la identidad. Por eso –continuó- nos enorgullece poder rendirles un homenaje a nuestros veteranos, que recién salían de la adolescencia cuando fueron convocados para ir a una guerra que no era de ellos. Tampoco nuestra. Era una estrategia de una dictadura genocida. Osvaldo Bayer decía que fue la única guerra donde murieron sólo soldados, porque los generales, brigadieres y oficiales se rindieron sin pelear”, subrayó. Al impulsar propuestas como la Muestra, además de seguir fortaleciendo el Departamento de Veteranos, “desde el IOMA queremos contribuir a borrar ese dolor que deja el haber estado en una guerra y apostar al futuro. En IOMA tenemos 25 veteranos trabajando, 7 mil veteranos afiliados, y reciben cobertura más de 11 mil familiares de ex combatientes” sostuvo La Scaleia. Respecto al inicio del Departamento, el máximo referente del Instituto indicó que “hoy parece fácil hablar de estas cosas, pero es destacable haberlo hecho en el año 2000, como lo hizo Julio Municoy mientras era presidente del IOMA, donde la Obra Social y la provincia les dieron lugar”, puntualizó, al tiempo que agregó “tener una memoria sana y un espíritu fuerte nos permitirá enfrentar batallas como la distribución de la riqueza, tener una sociedad cada vez más inclusiva, aprender a vivir sanos y en paz y a disfrutar de una patria soberana. Para lograr todo esto, el camino nunca es la guerra”. En su rol de segundo orador, Julio Municoy agradeció a La Scaleia y elogió la iniciativa, al tiempo que recordó algunas vivencias de su participación en Malvinas: “Yo era médico en el Hospital Posadas. Después de la recuperación de las Islas el jefe de anestesiólogos nos convocó para ir a Malvinas. En 48 horas nos alistamos como voluntarios civiles para ir a Puerto Argentino, junto con otro colega”. Municoy señaló que algunos médicos militares se excusaron de ir por presuntos problemas de salud. Una vez en Puerto Argentino, las tareas fueron en condiciones difíciles: “45 médicos, 26 enfermeros y 24 soldados de guardia. Ese era todo el equipo para cubrir a 10 mil personas. El quirófano era la cancha de básquet de una escuela. Teníamos poca sangre y poco oxígeno. Desde el frente llegaban soldados con pie de trinchera, congelados. Por eso más de doscientos veteranos tuvieron que ser amputados”. Acerca del final de la guerra, Municoy contó que “después de tres días en las Islas volvimos a Madryn. Nos llevaban escondidos, de noche, hasta Palomar. Con el otro médico que fue conmigo nos escapamos y fuimos hasta el Posadas. Empezamos a contar lo que vivimos y nos echaron del trabajo. Luego nos reincorporaron a condición de no hablar de Malvinas. En democracia pudimos decir la verdad. Logramos una pensión, después de mucha lucha pude llegar a ser intendente, luego dirigir el IOMA y hacer lo que sentí siempre: formar el Departamento de Malvinas. Esto es un orgullo y un honor. Esto se lo debemos a los compañeros veteranos. Sigamos la lucha. Un aplauso a nuestros héroes”, concluyó. Por su parte, José Raschia, rememoró: “Llegamos aquí hace trece años y empezamos a recorrer los pisos. Al principio éramos tres, después se sumaron los centros de veteranos quienes eligieron a sus referentes para integrar el departamento. En 2001 nos llamaron a colaborar en la sede Central, a atender público, ahí nos integramos, nos recibimos de empleados del IOMA.” En relación al compromiso del IOMA, Raschia relató que “en 2007, cuando algunos viajaron a Malvinas, La Scaleia se preocupó por saber qué necesitaban. Cuando regresó de ese viaje el compañero y ex combatiente Julio Aro quería saber sobre las tumbas sin nombre. Por eso IOMA nos apoyó para viajar a Inglaterra a recabar información. Allá nos entrevistamos con el que había hecho el cementerio de Darwin. Nos entregó un documento, con el plano. Con ese trabajo pudimos venir a discutir al país para ponerle un nombre, un rostro a los caídos. Hoy estamos en las instancias finales para lograr este propósito”. De cara al futuro, Raschia adelantó “queremos volver a nuestras bases, a los Centros de Veteranos para trabajar en prevención. Por último quiero agradecer a las autoridades y a Antonio por estar siempre con nosotros”. A su turno Fernando del Corro, compilador del libro Malvinización y Desmentirización aseguró “a lo largo de muchos años el tema Malvinas fue ocultado, o reivindicado desde el punto de vista nacional, pero sin desarrollar el fondo de las cuestiones. Eso me llevó a hacer este libro, para conocer el tema desde distintas facetas. Era necesario que se entendiera por qué las islas son importantes para los británicos: debido a su gran impacto económico”. Asimismo elogió el abordaje realizado por IOMA sobre Malvinas y la labor del Departamento de Veteranos. Otro de los coautores de Malvinización y Desmentirización, Eduardo Domínguez Marín, manifestó su beneplácito al encontrar “espacios como este, el creado por el IOMA, espacios que se recuperan la memoria, la identidad. Sin memoria, es imposible que un país se desarrolle”. En ese sentido añadió “frente a la desmalvinización, frente al intento de ocultar lo que sucedió, en el libro hicimos un ensayo con aportes sobre Malvinas desde distintos ángulos. Lo meritorio está en resistir, construir nuestra identidad, saber quienes somos. Por eso es muy elogiable la tarea de los Veteranos del IOMA”. En el cierre, Guido Carlotto, agradeció al presidente del IOMA y a los veteranos por la invitación y celebró “que en el IOMA haya un Departamento de Veteranos. Es muy importante el tema de la memoria, revisarla, mantenerla viva, que no termine en un simple homenaje, contar, identificar las tumbas de Malvinas. Quien destruye la memoria, destruye el futuro. Recordar es una forma de construir. Por eso felicito a los compañeros del IOMA por esta Muestra. Es importante contarnos nuestras propias historias, por respeto a los que no están. Así vamos a ser un país más justo, equitativo, con justicia social, más verdadero”. En su intervención, La Scaleia también aprovechó para agradecer la presencia del secretario de Derechos Humanos bonaerense, Guido Carlotto; de Julio Municoy; Fernando del Corro, Eduardo Domínguez Marín, del vicepresidente del IOMA Roberto Passo, a los miembros del Directorio, del Consejo Consultivo Gremial, Directores, Directores Regionales; representantes de entidades prestadoras como FECLIBA, ACLIBA, FEMECON, Agremiación Médica Platense, FABA, Colegio de Farmacéuticos de Bs. As. y AFALP. Finalmente, y antes de recorrer la muestra, se entregaron placas conmemorativas
a los disertantes, y diplomas de honor a los compañeros trabajadores
del IOMA y Veteranos de Guerra de Malvinas. Julio de 2013 |